Canelones necesita dónde poner su basura. Las regulaciones existentes dejan muy pocos huecos para hacerlo, y el que se sospecha que será elegido, al norte de la ruta 8 y en las nacientes del Solís Chico, desató una polémica que el miércoles llegó al Parlamento. Sin embargo, ni la decisión resistida se ha tomado todavía ni la rebeldía de estos vecinos se restringe a una cuestión de localización.
“Un megabasurero en el arroyo Solís Chico” es algo que suena feo. Muchísimas personas disfrutan de las playas de su desembocadura, ahí entre Parque del Plata y la Floresta, mientras desde el puente los envidian los innumerables transeúntes de la ruta Interbalnearia. En torno a su cuenca viven unas 20 mil personas. La belleza del sitio sostiene una fuerte actividad turística y no se necesitan sesudos...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate
