Cuarenta y cinco minutos antes de salir a escena un 5 de enero con el unipersonal “Cabrerita”,¹ la cola para verlo dobla la esquina de Sala Verdi. El actor Carlos Rodríguez recibió un premio Florencio por este trabajo, y en los liceos encontró otros.
—Estrenaste esta obra en 2005; más allá de que te reportó un premio Florencio, ¿tiene alguna particularidad en tu trayectoria?
—Me desafió y marcó. En primer lugar, porque es un unipersonal, me enfrento solo con el público, y está basado en una persona que muchos recuerdan. Ni físicamente me parezco a él; medía un metro cincuenta y yo uno ochenta y cinco (risas). Cuando mi amigo Eduardo Cervieri me acercó este texto, que escribió y dirigió, le dije que íbamos a estar tres días en cartel, por lo que moviliza. Estaba equivocado, hace 13 años que...
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