La nueva ministra de Defensa alemana, y probable sucesora de Angela Merkel al frente del gobierno, espera aumentar el gasto militar y lograr que el ejército nacional lidere misiones internacionales. Sin embargo, la normalización, a los ojos de la sociedad, de unas fuerzas armadas con un pasado oscuro aún está lejos de lo que las autoridades desean.
Soldados en fila, con fusil al hombro, que responden
con sus movimientos orquestados a las órdenes de una voz ruda. Música marcial,
silencio, orden y disciplina. En Berlín no es común manifestar poderío militar
por buenas razones históricas. La última ceremonia de estas características en
este lugar, delante del Reichstag, se celebró en 2013 en medio de protestas.
Es por
ello que el pasado martes 12 fue un día con el que el gobierno alemán querí...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate