Con Mariana Lobo
La pregunta va de sien a sien: por qué su trabajo en La fiesta de Abigail no recibió, siquiera, una nominación al premio Florencio, cuando merecía ganarlo. Ya obtuvo uno, Revelación, en 2003, pero aquí la actriz Mariana Lobo consigue brillar en un elenco rutilante. Y logra conmover a ese público actual que la inquieta.
—¿Formación?—Cursé tarde, con 29 años, la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático (emad), luego de una crisis existencial que me dio la oportunidad de darme cuenta que quería ser actriz.—¿A qué te referís con que te dio la oportunidad? —Venía saliendo de una depresión muy grande, buscando mi vocación sin encontrarla.—¿Eso causaba la depresión?—Junto a otras cosas, la muerte de mi padre, por ejemplo. Un día mi madre me dijo “soñá qué querés ser”, y yo ...
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