Nosferatu, 100 años de un clásico - Semanario Brecha
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Nosferatu, 100 años de un clásico

Cuando los vampiros eran horribles

No hay nada de seductor en la figura desgarbada, en extremo ojerosa y pálida, calva y jorobada, de orejas puntiagudas, uñas largas y dientes afilados del Conde Orlok. Fue el primer vampiro en aparecer representado en una pantalla de cine y, 100 años más tarde, sigue siendo el más aterrador. Porque es posible que Orlok no haya logrado vivir eternamente, pero Nosferatu es inmortal.

Fotograma de la película

Nosferatu corrió un riesgo mucho más grande que la exposición a la luz del sol que lo mata en el mundo ficcional cuando Ellen/Nina1 logra retenerlo hasta el amanecer. Murnau filmó su película entre agosto y octubre de 1921; es la primera –y, a la postre, la última– producción de Prana Films. El guion no disimula que está basado en Drácula, de Bram Stoker, pero, por alguna razón, Prana no compra los derechos. El porqué de esta omisión no está muy claro. Algunos afirman que, como Alemania estaba embargada producto de las sanciones tras la Primera Guerra Mundial, los productores pensaron que no valía la pena invertir en derechos, ya que la película no se vería más allá de las fronteras de la república de Weimar. Sea como fuere, lo que hizo el guionista Henrik Galeen fue cambiar los nombres de...

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