Antes de convertirse en uno de los compositores más originales de la música uruguaya, el guitarrista y cantor Fredy Pérez accedió a maestros que lo empujaron hacia una magia propia. Quienes asistieron a su recital “Me gusta lo desparejo”,1 en la Sala Zitarrosa, pudieron apreciarla en vivo.
—Decís que lo
que hacés con tus canciones criollas no es folclore. ¿Por qué?
—Porque
folclore es lo que Lauro Ayestarán investigó y definió como tal: el cielito, la
vidalita, el pericón. No hacemos esas canciones nosotros. Zitarrosa no era
folclorista.
—¿Podemos llamarla música de raíz folclórica?
—Sí,
porque usamos ritmos de chamarrita, estilo y demás, con otras letras y asuntos.
—Pero
tu tema “No te apures, Carablanca”, difícil de olvidar, mira con ojos de
matrero.
—Claro,
la soledad, la tristeza y la...
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