Ya pasaron las elecciones y Barack Obama continuará en el gobierno como el presidente número 44 de Estados Unidos. Los analistas políticos les prestarán mucha atención a la mecánica de las campañas, a las técnicas para captar a los potenciales votantes, a la eficacia de los esfuerzos para lograr que más gente vote. Los analistas de los medios llenarán los espacios de las cadenas de noticias del cable con comentarios poselectorales acerca de la precisión de las encuestas o acerca del apoyo que tuvieron los candidatos en un determinado grupo demográfico u otro. Mientras tanto, en el corazón de la democracia estadounidense están los movimientos sociales, sistemáticamente dejados de lado por los medios masivos, pero sin los cuales Obama no habría sido reelecto. Obama es un ex dirigente social...
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