Mucha tinta se ha desparramado sobre la guerra del gas que infligió Rusia a la Unión Europea (ue) a través de Ucrania, por donde pasa 60 por ciento de las exportaciones gaseras de Moscú al viejo continente, de las cuales la tercera parte se destina a Alemania. La misma Ucrania en sus nuevos tres conspicuos componentes –la parte occidental eurófila, la parte oriental rusófila y la exquisitamente sensible península de Crimea, que busca incorporarse a Rusia– depende del 60 por ciento de su importación del aún insuperable gas estatal ruso. Ucrania posee 39 billones de pies cúbicos en reservas de gas natural que aún no explota: ¡la cuarta parte de las reservas probadas mundiales!Chevron –la omnipotente trasnacional estadounidense– firmó con el fallido trapecista y saltimbanqui, el defenestrado...
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