La filmografía del cineasta chileno Silvio Caiozzi es escasa, pero con apenas una decena de títulos ha cosechado más de un centenar de premios y menciones en festivales internacionales, y es uno de los directores latinoamericanos más premiados de la historia. En sus inicios trabajó como director de fotografía, entre otros con Costa Gavras para su Estado de sitio, y con Raúl Ruiz en Palomita blanca. Su trayectoria estuvo combinada con una extensa carrera como director publicitario, y sus películas durante la dictadura militar –A la sombra del sol (1974), Julio comienza en julio (1976), Historia de un roble solo (1982) y La luna en el espejo (1990)– se caracterizaron por sugerir lecturas sobre la situación chilena. En su brutal documental Fernando ha vuelto (1988) registró el momento en que ...
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