El 29 de marzo una niña ingresó al Centro Hospitalario Pereira Rossell (Chpr) por disposición judicial, tras una denuncia anónima de abuso. Allí se constató que estaba embarazada, y por lo tanto, también, que había sido violada. Así lo indica la legislación, que no contempla el consentimiento de la relación sexual de una menor de 13 años en una situación de este tipo.
Previamente la justicia había determinado una restricción de alejamiento de 300 metros para el hombre, de 41 años, allegado a la familia. El incumplimiento de la medida mientras la niña estuvo internada –hecho que fue denunciado esta vez por la madre– determinó la detención y el posterior procesamiento con prisión del agresor por el delito continuado de violación.
A pesar de la situación, la niña manifestó desde el principio ...
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