Dos liceales de Montevideo se suicidaron la última semana de noviembre de 2020, uno de Colonia lo hizo a fines de marzo y tres de Canelones en la segunda mitad del año pasado. Aunque el acto de quitarse la vida sea un fenómeno pluricausal, la «sensación térmica» de los docentes próximos a estos casos es que los protocolos definidos para enfrentar la pandemia, en particular el uso obligatorio del tapaboca en los centros educativos, ambientan desenlaces de este tipo. Enterada en noviembre de que el uso de la mascarilla sería obligatorio para su hijo en edad escolar, la profesora de matemática Daniela Hernández fundó el grupo Educar sin Tapar Bocas, que comenzó siendo de madres y padres con hijos que van a la escuela y hoy abarca a docentes y profesionales de la salud, y tiene página Facebook...
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