Una de las Sofías directoras del documental musical “Dos orientales”1 comenta, aquí, las razones que las zambulleron en el torrente musical y afectivo que comparten el uruguayo Hugo Fattoruso y el japonés Tomohiro Yahiro.
—¿Desde el vamos tenían en mente un documental?
—No, llegamos a él desde una primera idea de Florencia Arbiza, la productora artística del material, que tenía un vínculo de trabajo previo, y empático, con Hugo. Él le comentó que estaban por concretar, con Tomohiro, una serie de espectáculos en Uruguay. Ella le preguntó si le parecía bueno registrarlos en audiovisual, él accedió y Florencia terminó trasladándonos la propuesta a nosotras, que venimos del palo de la realización cinematográfica; las tres, de paso, creamos una productora de contenidos audiovisuales y artístico...
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