En una decisión sin precedentes, la justicia chilena enjuició por injurias a un periodista que se refirió a un testimonio que relata cómo el ex militar Raúl Quintana Salazar –preso por crímenes de lesa humanidad– habría violado a la uruguaya desaparecida Nelsa Gadea, a quien secuestró en 1973. Mientras, el nuevo gobierno ha concedido tres indultos y prepara un proyecto de “ley humanitaria” para conceder libertades a presos por estos delitos.
Nada ni nadie recuerda a Nelsa Gadea en la Villa Frei, de Santiago de Chile. En ese extenso complejo habitacional con aires de Brasilia, construido en los años sesenta, el apartamento 407 del bloque 29 está cerrado y protegido por las rejas que la paranoia desatada por la delincuencia hace cada día más fuertes y más simbólicas del aislamiento en que va...
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