En los últimos diez años las reservas probadas de petróleo de Venezuela crecieron 274 por ciento, pasando de 80.000 millones de barriles en 2004 a 298.000 millones en 2014. Se multiplicaron casi por cuatro, convirtiendo al país en la primera reserva mundial de crudo del mundo, con casi el 20 por ciento del total planetario.
En el mismo período, las reservas de Arabia Saudita crecieron apenas 1 por ciento, a 267.000 millones de barriles. O sea, se quedaron estancadas. El país árabe pasó de ser la primera reserva del mundo, título que ostentaba desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, a colocarse en un segundo puesto. Sus reservas representan ahora apenas el 15 por ciento del total global. Pero todo indica que la diferencia entre los dos primeros del ranking puede estirarse aun más, porque...
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