La muerte de José Wilker
“Vadinho”, le decía todo el mundo en el Festival de Punta del Este al que asistió, hace unos muy pocos años. Como selecto miembro de la cada vez más escasa tribu de los que salíamos a fumar, conversó algunas veces conmigo sobre el festival, sobre Brasil, las películas que acompañaba, las que había hecho o quería hacer. Era divertido y brillante, tomaba como lo más natural del mundo lo que a otros nos parecía una proeza. En una de esas charlas humeantes alguien pasó y otra vez se escuchó: “¡Hola, Vadinho!”. Es que el personaje que interpretó en Doña Flor y sus dos maridos (1974), la película brasileña que hasta hoy es la que batió récords de taquilla, lo volvió no sólo popular sino un personaje recordable para todo el mundo. Vadinho-Wilker, ya fantasma y sentado so...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate