Esperando la entrada
El sábado pasado quien escribe se dispuso a ver La visita, reciente estreno del elenco oficial en la sala del Solís. A tales efectos, se dirigió a la boletería del teatro dos horas antes, teniendo en cuenta que los sábados no siempre es fácil conseguir localidades. Al llegar al lugar citado, en el cual, cabe acotar, cada vez que se solicita una entrada de prensa poco menos que hay que llenar un “completo administrativo” y pasar a través de un ojo eléctrico, las tres jovencitas que lo atendían dieron muestra de no tener la menor idea de la existencia de las tales entradas de prensa y, menos aun, del semanario Brecha. Contemplaron a este escriba como si se tratase de un ciudadano esloveno que acudiera a tramitar la patente de rodados. Una de ellas, sin embargo, solicitó...
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