Budi es un pequeño país entre dos vecinos más poderosos, Ranco y Rupanco. Todos tienen fronteras comunes. Budi tiene “problemas de gobernabilidad”, que Rupanco atribuye a los ulmos, una minoría étnica que exhibe “escaso desarrollo y prosperidad”. Ello justifica que Rupanco impulse “acciones de hostigamiento” contra esa minoría. Seriamente preocupada por los ulmos, la Onu aprueba una resolución para el “restablecimiento de la paz”, una paz, claro, que se impondrá mediante acciones de guerra de las fuerzas aéreas de cinco países coaligados, que operarán en bases instaladas en Ranco.
No alarmarse: los ulmos no son charrúas, Budi no es Uruguay, y Ranco y Rupanco nada tienen que ver con los vecinos (el lector podrá atribuir los papeles a gusto). En realidad, el escenario de esta “guerra” es esa...
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