Con británica puntualidad, el Tribunal Supremo Electoral difundió los datos exactamente a las 20 horas, cuando cerraban los últimos circuitos en el amazónico estado de Acre. De una, largaron el 94 por ciento de los votos escrutados hasta ese momento, casi cien millones de sufragios, milagro posible gracias a las urnas electrónicas que funcionan desde las elecciones de 1996. Dilma Rousseff fue reelecta con poco más del 51 por ciento de los votos. Poco, pero suficiente. No hubo festejos en las calles, como sucedió en 2003 cuando el primer triunfo del PT.
Las izquierdas (dentro y fuera del PT), los movimientos sociales, intelectuales como Leonardo Boff y Emir Sader, medios como Carta Maior, que se jugaron por Dilma, mostraron su esperanza de que, agora sim, se produzca la ansiada virada hacia...
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