“Molinos”, la primera y más extensa de las cuatro secciones en las que está organizado este nuevo libro, se caracteriza por ese estilo de textos cortos y despojados en los que Galeano mezcla la búsqueda de la prosa poética y el ritmo de la crónica oral. Un estilo y un tono que el autor ensayó por primera vez en Días y noches de amor y de guerra y logró con mayor nitidez en Los hijos de los días.
La segunda sección, “Los cuentos cuentan”, se detiene en historias y testimonios acerca de la deriva de sus libros anteriores, en un formato menos fragmentado y, tal vez, más fresco. Finalmente “Prontuario”, como su nombre lo indica, es un segmento netamente autobiográfico, y “Quise, quiero, quisiera” da un cierre casi místico, ajuste de cuentas panteísta de un autor que perdió la fe en el Dios ofi...
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