Un día después del primer paro general de trabajadores en su gobierno, el 15 de julio de este año, el presidente Tabaré Vázquez anunció la construcción de una tercera planta de celulosa en suelo uruguayo, una inversión que “no tiene antecedentes en la historia económica del país” y que se estima en 5.000 millones de dólares si se suma la porción que el Estado aportará en infraestructura. Si bien la concreción del proyecto está sujeta a las negociaciones entre el gobierno y la empresa Upm, el Ejecutivo ha asegurado en numerosas ocasiones el “gran interés” de ambas partes en que se materialice la segunda pastera de la empresa finlandesa.
Varios son los aspectos que deberán ser resueltos para que la planta sobre la cuenca del Río Negro –su ubicación precisa aún no está definida, será Durazno ...
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