Nueve presos ejecutados por día: ése es el saldo de la guerra en los presidios brasileños en los primeros 15 días del año, cumplidos ayer cuando agentes penitenciarios reportaron el asesinato de entre 27 y 30 reclusos en la cárcel de Alcaçuz, en Río Grande del Norte. Fue la cuarta masacre desde el 1 de enero y la “más grave de la historia de Río Grande del Norte”, dijo Walber Virgolino, secretario de Justicia local.
Pese a la gravedad de la situación en las cárceles del norte y el nordeste, el presidente Michel Temer no ha viajado a la zona de las matanzas y se limitó a lamentar el episodio de Río Grande del Norte vía Twi-tter.
Encerrado en Brasilia, de donde prácticamente no sale debido a las manifestaciones en su contra, Temer asiste a la matanza entre el Primer Comando de la Capital (Pc...
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