Este año se cumple un siglo de la revolución rusa. Difícilmente haya otro aniversario de alcance similar o de igual simbolismo. Países bien organizados ya vienen adelantando reflexiones y editando libros sobre un acontecimiento que fue un punto de inflexión en la historia moderna. La revolución bolchevique marcó más profundamente el devenir del siglo XX que la gran guerra del 14 que se eligió para decidir sus comienzos. La caída del muro en 1989, que desmoronaba el universo que aquella revolución había inaugurado, fue, según Eric Hobsbawm, el fin de lo que él vino a llamar “el siglo corto”. El gran historiador marxista inglés había nacido apenas unos meses antes de la revolución, el 9 de junio de 1917, y cuando estuvo en Montevideo en 1999 y recibió un Honoris Causa en el Paraninfo de la U...
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