De la pared blanca, sobresale la imagen de Tita Merello en el afiche de la película argentina Para vestir santos (1955). La figura enmarca la charla con Martín Borteiro, quien repasa, con voz entusiasta y pausada, la cantidad de libros e investigaciones que ha hecho, sus proyectos audiovisuales y hasta los tangos que lleva bailados. Tiene 41 años y reconoce que no fue fácil entrar en “el mundo de los que saben mucho de tango”.
“Hay mucha gente que sabe mucho de tango y es de otra generación. Los jóvenes tenemos una diferencia de edad de 40 o 50 años con los coleccionistas. Para enganchar con eso hay que saber mucho, porque no te podés sentar a hablar con un tipo que es especialista en Carlos Gardel”, dice Borteiro.
“Desde los años treinta a los cincuenta y pico, el tango era lo único que s...
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