Los “mareros” –integrantes de pandillas– en El Salvador son más de 60 mil. La quinta parte de ellos está en prisión. En cinco años, sólo los enfrentamientos entre pandilleros causaron casi 20 mil muertes. En marzo pasado líderes de las dos principales maras, la 18 y la Salvatrucha, iniciaron una tregua que hizo bajar abruptamente el número de homicidios, pero la sustentabilidad del alto el fuego a mediano plazo está en duda. En la siguiente nota,* autoridades, mediadores, empresarios, pastores y pandilleros –activos y retirados– hablan sobre el nuevo escenario que ha dejado la tregua.
En octubre de 2009, cuando el gobierno encabezado por Mauricio Funes daba sus primeros pasos en un ambiente de esperanza por los cambios positivos que en teoría se avecinaban, el comisionado Douglas Omar...
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