El último debate previo al balotaje entre Javier Milei, por La Libertad Avanza (LLA), y el candidato oficialista y ministro de Economía, Sergio Massa, puso blanco sobre negro las lógicas mantenidas desde hace años en la sociedad argentina. A lo largo de casi dos horas en el aula magna de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, la mesura y la discreción que pretendía representar Massa contrastaron con las intervenciones adjetivadas y agresivas con las que Milei intentaba presentar su discurso. Massa logró imponer su lógica a Milei, obligándolo a responder y sin darle la oportunidad de proponer. Los dos minutos finales, en las respuestas a la pregunta «¿para qué quiere ser presidente?», mostraron a Massa con promesas varias y a Milei proclamándose como lo nuevo y necesario...
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