De vocación descubridor. En su ensayo Los lugares de la memoria, Anna María Guasch reflexiona sobre la voluntad archivística de Walter Benjamin reflejada en la preparación de sus Pasajes, donde “hace del ‘almacenamiento’ su razón de ser y sustituye el texto cíclico discursivo por una acumulación de fichas en las que durante más de trece años (desde 1927 hasta su muerte en 1940) va alternando documentos autobiográficos con conjuntos de ‘citas’ (…) en un proyecto abierto y susceptible de múltiples combinaciones, como un álbum de hojas movibles (…). La historia y la biografía de Benjamin quedan fragmentadas en anotaciones, borradores y listas de cuestiones similares a ‘tomas fotográficas’. Son en total 36 categorías con títulos descriptivos como ‘Moda’, ‘Aburrimiento’, ‘Ciudad de sueño’, ‘Fot...
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