Adiós, Bandera roja nuestrafuiste nuestro hermano y nuestro enemigo.Fuiste el camarada del soldado en las trincheras,fuiste la esperanza de la Europa cautiva.Pero, como una cortina roja, tras de ti ocultabas el gulagrepleto de cadáveres helados.¿Por qué lo hiciste,Bandera roja nuestra? […] no podemos arrancarnoslas lágrimas de los enrojecidos ojos,porque tú ferozmentegolpeaste nuestras pupilascon tus pesadas borlas doradas. […] Nacimos en un país que ya no existe.Pero en aquella Atlántida estuvimos vivosy fuimos amados. (Traducción del autor.) *** Ir desde México a Rusia es llegar siempre a Evgueni Evtuchenko, el más latino de los poetas rusos. Con estatus de rock star entre la juventud soviética de los sesenta por su actitud irreverente hacia el poder, Evtuchenko fue un producto del des...
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