El tercer paro nacional contra el gobierno de Mauricio Macri llegó con la contundencia que había faltado en los dos anteriores. El lunes, calles y avenidas de la capital estaban desiertas, las persianas de los comercios bajas, las terminales ferroviarias cerradas y las paradas de ómnibus sin gente esperando. El Frente de Izquierda y los Trabajadores (Fit), junto con el sindicalismo combativo de izquierda, cortaron accesos a la ciudad en puntos estratégicos vigilados de cerca por cientos de efectivos de Gendarmería Nacional. Ese fue el escenario registrado por las cámaras de televisión y los medios de prensa en las principales ciudades del país.
Tras meses de presiones de los movimientos sociales, el paro fue convocado finalmente por la Confederación General del Trabajo (Cgt), las dos Cta ...
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