Necesitaba dos tercios de los votos de la Cámara de Diputados para bloquear un juicio ante el Supremo Tribunal Federal. Para conseguirlo, el presidente brasileño se dispuso a permitir el trabajo en condiciones de esclavitud y a gastar 12.000 millones de reales del Estado. Michel Temer se empeña en recortar las jubilaciones, pero no duda en aumentar el gasto público para evitar ser juzgado.
Por segunda vez en casi tres meses la Cámara de Diputados de Brasil rechazó una denuncia de corrupción contra el presidente del país. Con 251 votos a favor, 233 en contra, dos abstenciones y 25 ausencias impidió que el Supremo Tribunal Federal (Stf,) juzgue a Michel Temer, acusado por la fiscalía de dirigir una organización criminal y de obstruir la acción de la justicia.
El gobierno esperaba una victori...
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