—Empiezo por una pregunta, ¿verdad? Debería ser así… –esa fue la primera y tímida intervención de la directora argentina Ana Katz al acomodarse en su asiento y tomar el micrófono. Aldo Garay, director de El hombre nuevo, la película que Katz había programado y que se acaba de proyectar en una sala Zitarrosa casi llena, asintió mientras buscaba solucionar un problema técnico en su propio micrófono. Así se iniciaba el diálogo que los tuvo como protagonistas en una de las fechas de “Plano americano. Charlas entre cineastas rioplatenses”. Se trata de una ocurrencia tan simple como atractiva, una idea al alcance de la mano y sin embargo poco frecuentada, al menos en nuestro país. Es decir, que tras las funciones de cine, y preparando el terreno para la rueda de preguntas del público, medie una ...
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