Brasil
Son incorregibles. El general, el almirante y el brigadier que comandan las fuerzas armadas de Brasil desafiaron a la presidenta Dilma Rousseff y a los parlamentarios reunidos en el Senado al permanecer inmutables, sin aplaudir, como lo hacía el resto de los presentes, durante la ceremonia en la que se le restituyó simbólicamente el cargo al ex mandatario João “Jango” Goulart, derrocado por el golpe de Estado de 1964. Enzo Martins Peri, Julio Soares de Moura Neto y Juniti Saito, jefes del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, respectivamente, observaron, sin gesticular, el momento en que Rousseff abrazó a João Vicente Goulart, hijo del presidente destituido, luego de recibir la resolución parlamentaria, votada por todos los partidos, que decretó nula la sesión de 1964 que legitimó...
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