El nuevo escenario político regional, con los cambios producidos en los gobiernos de Brasil y Argentina (en Paraguay ocurrió pocos años atrás), ha puesto en entredicho el pacto regional. El episodio que disparó la actual crisis del Mercosur fue la decisión uruguaya de cesar en la presidencia pro témpore del bloque una vez cumplido el plazo de seis meses que establece el estatuto del bloque. En ese plano la conducta del gobierno de Tabaré Vázquez se atuvo a derecho, pero el problema surgió con el paso siguiente: de acuerdo al artículo 12 del tratado y al artículo 5 del compromiso de Ouro Preto, la presidencia pro témpore rota en orden alfabético. Después de Uruguay le correspondía, por ende, a Venezuela. Pero Brasil, Argentina y Paraguay se niegan a dicho traspaso, argumentando que el país ...
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