“La plegaria del vidente”
El consabido cartel inicial declama que los hechos narrados son fruto de la ficción. Esa es la primera mentira flagrante y la única mentira disculpable de esta película* obviamente basada en un caso real ocurrido en Mar del Plata en 1996, en el que prostitutas de distintas edades fueron sistemáticamente asesinadas por un supuesto “loco de la ruta”, un personaje acaso inventado por autoridades políticas y reporteros afines para exculpar a culpables más factibles, más uniformes y más uniformados: algunos integrantes de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Las otras mentiras de las que se valen el guionista Carlos Balmaceda y el director Gonzalo Calzada son menos flagrantes pero también menos inocentes. Consisten en armar una suerte de puzle político-fantásti...
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