Con la curadora Tatiana Oroño
—La investigación empezó en abril de 2011 a propuesta del museo y la Fundación Gurvich. Se planteó como campo el “área docente” de José Gurvich, creo que con esas palabras. Dije que sí en cuanto pensé quién soy y de dónde vengo. Esa consulta a mis identidades de origen –padre, madre, vocación juvenil y otras parentelas, entre las cuales estaba el lejano (e inolvidable) contacto infantil con el propio Gurvich en sus casas-taller– me daba el pase. Después vino el trabajo. Pensar cómo arreglármelas y hacerlo. Cuento en el catálogo, en la introducción, cómo de alguna manera, el trabajo a emprender se me ofreció como posibilidad de respuesta a aquella interpelación a mi futuro que estuvo implícita en uno de los gestos de Gurvich que no olvidé. Nos retirábamos un d...
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