Sísifo fue el tramposo rey de una isla griega capaz de encadenar a Thanatos cuando éste lo fue a buscar, y que con argucias logró volver de muerte. Por ello fue condenado a subir una roca hasta un peñasco, pero al día siguiente la roca aparecía al pie de la montaña y nuevamente debía subirla. Es una metáfora del esfuerzo inútil e incesante. A partir del análisis de Albert Camus en El mito de Sísifo (1942) y de los hallazgos de los críticos-reproductivistas de los sesenta, hay quienes advierten una analogía del mito Sísifo con la educación. Esto es cuando se observan esfuerzos permanentes para que los más desfavorecidos avancen y, sin embargo, los resultados son persistentemente adversos. Así lo señala Philippe Perrenoud (1999) en Les systèmes éducatifs face aux inégalités et à l’échec scol...
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