Y pasa cada día
Las personas que vemos en la foto, por esas raras coincidencias de gestos especiales que un fotógrafo alerta llega a captar, parecerían adorar la luz, buscarla, recibirla. En realidad la foto retrata a migrantes somalíes que buscan señal con sus celulares. Buscan comunicarse con parientes en una playa llamada Korlay, cerca de Djibouti. Korlay, se explica, significa “agua muerta” o “agua de la muerte”. Junto al agua de la muerte los somalíes de la foto, como todo migrante, buscan alguna manera de perpetuar o mejorar su vida. Y es trágicamente acertada esa conjunción, porque la manera en que los africanos que huyen de su país transitan esa migración comporta, ciertamente, peligros de muerte. Y muerte en el agua. Esta misma semana otra foto dio la vuelta al mundo: mostraba a ...
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