“Los croods”
Los niños se entretienen y, mejor aun, se divierten y se ríen a carcajadas con los tropiezos, los tropezones, los peligros, los miedos, los errores y las argucias de los personajes. Los preadolescentes y los adolescentes se identifican a pleno con una mirada cósmica que le otorga el lugar que les corresponde a los romances juveniles (y, por qué no, a una sexualidad más o menos precoz) y que hace hincapié en la imperfección, cuando no en la tontería de los adultos.
Los adultos encuentran sin mayor esfuerzo referencias, alusiones indirectas y guiños que, de alguna manera, los involucran emocionalmente. Todos quedan admirados con las carreras, el vértigo, los efectos especiales en 3D. Todos perciben, en conciencia o en éxtasis, que la factura es apolínea, impecable, perfecta...
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