El relato de esta novela empieza con el toque de queda, impuesto en las ciudades de Perú en los últimos años del gobierno de Alberto Fujimori, cuando las huestes del Mrta y sobre todo de Sendero Luminoso atentaban con explosivos y secuestraban personas a cambio de jugosos rescates. (Pasaban muchas más cosas terribles, como asesinatos masivos por parte del terrorismo y por parte de las fuerzas oficiales, pero de esto no se sabrá en este libro.)
Por el toque de queda, Chabela, esposa del eminente abogado Luciano Casasbellas, no puede volver a su casa en la exclusiva La Rinconada, y se queda a dormir en San Isidro, en el penthouse de su amiga íntima Marisa, esposa del rico minero Enrique Cárdenas, o “Quique”. “¿Había despertado o seguía soñando? Aquel calorcito en su empeine derecho (…)”, así...
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