Un inexplicable suicidio y una inmigrante eslovena, Sonia (Ksenia Rappoport), camarera en un hotel, un ex policía (Filippo Timi), el encuentro de ambos en una de esas instituciones dedicadas a armar parejas, un comienzo amoroso, un robo violento, alguien muere, alguien queda herido, la vida sigue.
Esta opera prima del italiano Giuseppe Capotondi riega datos que pueden parecer importantes y no serlo, pero sí ayudan a cierto clima que se busca, y otros que podrían ser importantes pero de entrada no lo parecen. Esa ambigüedad luce adecuada para un thriller que podría ser llamado psicológico, con apelaciones a lo onírico y lo sobrenatural, entre cuyos méritos cabe anotar sobre todo tres. Uno, los intérpretes. La rusa Rappoport, que protagonizó La desconocida de Giuseppe Tornatore, porta u...
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