Fátima tiene dificultad en recordar cómo vivía antes de la guerra. Antes de la guerra no es un día concreto. Las personas se habitúan a las nuevas condiciones, sobreviven de cualquier manera con la esperanza de que pronto las cosas van a mejorar. Pero para los refugiados sirios las condiciones empeoran cada día, hasta el límite de la capacidad humana de resistir.
Fátima es alta, con la tez muy lisa y blanca, los ojos grandes. Antes de la guerra tenía una buena situación económica. Su esposo era médico. Un día bombardearon su casa y mataron a su esposo. Después una retroexcavadora quitó los escombros y allí donde había vivido toda su vida no quedó más que un baldío, un cuadrado vacío y limpio como si jamás hubiese existido una casa, ni una familia, ni unos juguetes de unas niñas, ni nada. Q...
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