Si las elecciones se hicieran el próximo domingo, el sentido común sufriría una derrota de proporciones insospechadas poco tiempo atrás. A contrapelo de la percepción generalizada que indicaba que la propuesta de reforma constitucional para bajar la edad de imputabilidad sería aprobada sin mayores inconvenientes, todo indica ahora que el resultado electoral podría ser precisamente el inverso. Si en junio de 2011 un estudio de la encuestadora Cifra marcaba que un 65 por ciento se manifestaba a favor de la iniciativa impulsada por el Herrerismo y el Partido Colorado, en julio de este año ese porcentaje descendió al 49, apenas por debajo del mínimo de 50 por ciento exigido por las normas electorales. El nuevo escenario, impensable hace apenas dos meses, fuerza especulaciones de todo tipo. Per...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate