Policiales
Como si de un acuerdo no escrito se tratara, las jóvenes generaciones, tanto en literatura como en cine vuelven a cultivar y, dadas las características nacionales, prácticamente a fundar la posibilidad de expresarse en los llamados géneros. Terror y ciencia ficción en el cine, sin excluir ese matiz que hace furor en todo el mundo –el mundo joven– y que se conoce como “lo bizarro”, y en la escritura, el florecimiento del policial. Ya parecía raro que ese camino tan prolífico hubiera tenido tan escaso aprovechamiento en este país. El género policial, como la tragedia, es eterno aunque gustos circunstanciales a veces lo hayan vuelto poco visible, o poco prestigioso, limitado a una suerte de clase B. Los miedos, patrañas, crímenes, oscuridades de toda laya que alimentan el policial...
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