«Aunque es insuficiente, hay un cambio positivo en la postura del nuevo gobierno uruguayo» – Semanario Brecha
Con Mohammed Shafei, el encargado de Negocios de la embajada de Palestina en Uruguay

«Aunque es insuficiente, hay un cambio positivo en la postura del nuevo gobierno uruguayo»

El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu parece haber logrado «uno de sus objetivos» –asegura la máxima autoridad de la embajada palestina en Uruguay– desde su llamado «ataque preventivo» a Irán: «Sacar el foco de Gaza». En los 15 días que transcurrieron desde entonces, mientras el mundo habla de uranio enriquecido y aviones B-2, el Ejército israelí asesinó a cientos de gazatíes. Shafei ve «señales positivas» de la actual cancillería uruguaya, pero espera que «tenga una postura más clara sobre el genocidio» y dice que aún no le llegó «nada oficial» sobre el plan de que jóvenes palestinos vengan a Uruguay.

Magdalena Gutiérrez

¿Cuál es tu lectura de esta «guerra de los doce días», denominación que ha utilizado Donald Trump para referirse a la escalada en Oriente Medio, que comenzó con el llamado «ataque preventivo» de Israel a Irán del 13 de junio y luego tuvo la incorporación de Estados Unidos, que el sábado pasado atacó tres instalaciones nucleares iraníes?

—Veo la fecha que eligió Israel para atacar a Irán. El 17 de junio se llevaría a cabo en Nueva York la conferencia organizada por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas [para la solución de dos Estados], promovida por Francia y Arabia Saudita. También había un proyecto en el parlamento israelí para votar su disolución [que podía acabar con la decisión de ir a elecciones anticipadas]. Así que Netanyahu, para proteger su puesto y su poder como primer ministro de Israel por tiempo indefinido, o al menos para mantenerlo lo máximo posible, eligió esa fecha. Varios países iban a participar al más alto nivel en ese foro y no quería dar la oportunidad de que todo el mundo presentara una postura firme en cuanto a imponer la legitimidad internacional y la aplicación de dos Estados. La idea de dos Estados, o concretamente de un Estado palestino, es totalmente rechazada por el gobierno israelí. Están trabajando diaria e intensivamente para que fracase cualquier intento de tener un Estado palestino libre y soberano.

¿Qué tan preocupante es para usted que Estados Unidos se haya involucrado directa y públicamente en el ataque a Irán?

—Era el objetivo de Netanyahu desde hace mucho tiempo. Desde el primer mandato del señor Trump intentó atacar a Irán y a otros países de la región. Intentó provocar problemas para que escalara la violencia en la región. Y ahora, finalmente, logró ese involucramiento.

Entiende que uno de los objetivos de Netanyahu con su ataque a Irán fue desviar la atención de cualquier posible acuerdo para alcanzar la paz en Palestina. ¿Cree que lo ha logrado? ¿Puede con esto caer Gaza en el olvido en un momento en que, por ejemplo, la Unión Europea empezaba a mostrarse más crítica con Israel?

—Ahora todo el mundo está enfocado en lo que está pasando con Irán, porque es una amenaza muy grande no solo territorial, sino también regional. Los medios están más enfocados ahí y menos enfocados en lo que está pasando en Gaza, menos enfocados en el genocidio que está perpetrando el Estado genocida de Israel, que está logrando desviar el foco, pero sigue masacrando y lamentablemente nadie habla de eso. Es como si fuera un día normal, la vida cotidiana a la que los palestinos ya están acostumbrados. Israel ha llegado al nivel de atraer al pueblo [a los centros de distribución de ayuda], a quienes buscan los alimentos básicos para dar a sus niños que están sufriendo el hambre, y matarlo. Y llegó a ese nivel porque no se ha actuado lo suficiente para parar este genocidio. Y tampoco quiere Israel salvar ni liberar a los rehenes. Está haciendo todo lo posible para que no se llegue a ningún acuerdo porque, si se llegara y ya no hubiera rehenes, no tendría esa excusa para continuar las masacres.

¿Entiende que es el propio Netanyahu el que ha demorado la entrega de los rehenes?

—Varias veces han llegado a un punto para liberar a los rehenes y Netanyahu ordena a su delegación que se retire. Es muy fácil: para liberar a los rehenes, que se retire el gobierno de Israel de la franja de Gaza, que pare toda agresión, que pare la matanza de niños, de civiles.

Por lo pronto, el domingo Israel confirmó la recuperación de los cuerpos de tres rehenes…

—Sí, pero recuperaron aún más durante los acuerdos parciales en dos o tres oportunidades en las que se liberaron bastantes. De ahí podemos entender que la única manera de parar esta tragedia es llegar a un alto el fuego inmediato y liberar a todos los rehenes de una vez. Eso servirá a todas las partes. Y hay que terminarlo del todo. No pararlo un mes o tres semanas para que únicamente saquen a los rehenes y luego Israel continúe con los ataques, sino para terminar el bloqueo que Gaza está sufriendo desde hace 16 años.

Señaló que «no se ha actuado lo suficiente para parar el genocidio». ¿Quiénes deberían haber actuado?

—El mundo entero, las Naciones Unidas. Para que se dé el cese el fuego inmediato, para establecer la paz en Gaza y para que se permita el ingreso de toda la ayuda humanitaria, porque la mayoría de la población en la franja de Gaza sufre un hambre aguda. Por eso las grandes potencias, como Estados Unidos, China, Reino Unido, Francia, tienen que actuar adecuadamente para impedir que Israel continúe con este genocidio. Y tienen que obligar a la comunidad internacional a que los causantes y los involucrados tengan un castigo, porque Israel desde hace 77 años, por la ausencia de castigo, está intensificando sus masacres todos los días y ahora está llevando adelante este genocidio.

El 21 de mayo soldados israelíes dispararon a una delegación de diplomáticos que recorría Yenín, en Cisjordania. El gobierno de Israel y su representante en Uruguay, la embajadora Michal Hershkovitz, justificaron su accionar en que, según afirmaron, la delegación se desvió del camino acordado. Como diplomático, ¿cuán grave resultó para usted este episodio?

—Es grave porque son diplomáticos y tienen todo el derecho de inmunidad. Algunos políticos israelíes dicen como excusa que no sabían quiénes eran, pero en las cámaras, en el video que todo el mundo ha visto, hay gente con traje y corbata, estaban hablando, ya sabían que era una delegación de diplomáticos que iba a ver la situación en Yenín. Para que quede aún más claro: hace tres años, un francotirador israelí mató en la misma ciudad a una periodista palestina estadounidense, Shireen Abu Akleh, aunque ella llevaba el chaleco y el casco con la palabra prensa. Sabían que estaba trabajando y que no era un peligro. Y la mataron. Quieren aterrorizar a cualquier persona que quiera ser testigo de lo que está pasando para que no vuelva y para que no traslade esa imagen del gobierno de Israel.

¿Cuál es su opinión sobre la postura adoptada por el actual gobierno uruguayo? ¿Nota algún cambio respecto a la pasada administración?

—Veo que hay un cambio positivo, aunque sea insuficiente. Pero estamos mirando hacia adelante, a que tenga una postura más clara sobre el genocidio, porque todo el mundo está cambiando ahora. Se está viendo claramente que lo que hay no es una guerra, no es legítima defensa, no es siquiera una agresión. Es un genocidio.

Colombia rompió relaciones con Israel en 2024 y su presidente, Gustavo Petro, ha reiterado que Israel está llevando adelante un genocidio. También han utilizado esa categorización el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y su par chileno, Gabriel Boric. En cambio, cuando se le ha preguntado al respecto al canciller uruguayo, Mario Lubetkin, ha planteado que no es una cuestión de palabras. ¿Lo es?

—No son suficientes las palabras, hay que ir más allá. Pero hay que demostrar que esto es un genocidio. No es cuestión solamente de palabras, estoy de acuerdo, pero es importante demostrar el rechazo de todo el mundo –de toda la comunidad internacional– a este genocidio y pararlo ya.

Usted mantuvo un encuentro con el canciller. ¿Le planteó su preocupación por que se hable de genocidio?

—Bueno, yo hablaba de genocidio y afirmé que lo que está pasando no tiene otra explicación. No encuentro otra palabra que genocidio.

Dijo que «hay un cambio positivo», pero es «insuficiente». ¿Qué acciones entiende que podría tomar el gobierno uruguayo?

—Yo no puedo meterme en la política interna del Estado ni pedirle a un gobierno que haga determinada cosa. Podemos conversar para que se actúe más para establecer la paz. Es claro que el gobierno de Uruguay está a favor de la paz y quiere actuar adecuadamente para ayudar a los palestinos, mandar ayuda humanitaria. Todo eso es bueno. El señor Lubetkin está totalmente de acuerdo en que la única manera de establecer la paz en la región es la existencia de dos Estados soberanos.

Pero le resulta insuficiente…

—Hasta ahora la actuación de todo el mundo es insuficiente.

El gobierno uruguayo acompañó el pasado 12 de junio una resolución de la Asamblea General de la ONU sobre Gaza presentada por España y Palestina en la que se pedía el alto el fuego, liberar a los rehenes y que Israel rindiera cuentas. ¿Qué importancia tiene para usted este cambio de Uruguay en las votaciones en la ONU respecto a la pasada administración?

—Es un paso positivo, pero tenemos que trabajar más aún para ayudar a poner fin a este genocidio.

El canciller anunció a principios de mes que Uruguay resolvió incorporarse a un proyecto liderado por Dinamarca de la mano del Fondo para la Alimentación y la Agricultura de la ONU por el que pretende traer a algunos jóvenes palestinos de Cisjordania «para prepararlos en la creación de start-ups [nuevas empresas], sobre todo, en agricultura». ¿Cómo ve esta iniciativa?

—Aunque yo no tengo nada formal, nada oficial, escuché del señor Lubetkin esta iniciativa. Es algo bueno para ayudar a los jóvenes palestinos a empezar proyectos de agricultura, pero también hay que destacar que en Cisjordania existe la agresión de los colonos. Estarán molestando, poniendo obstáculos para que no avance ningún proyecto que esté por empezar, en cualquier ámbito, para los palestinos. Pero es una propuesta muy buena y podemos construir y avanzar sobre esa base.

¿El canciller se ha contactado con usted por esta iniciativa?

—No. Creo que todavía es una idea, una propuesta. No tenemos nada oficial para hacerlo realidad. Tal vez tienen en otro lado la idea de algo concreto que se puede cristalizar, pero nosotros como palestinos no tenemos algo oficial para que nos comuniquemos con el Ministerio de Agricultura y, entonces, empezar el proyecto.

Cuando se dio a conocer la intención del gobierno uruguayo de participar de esta iniciativa, el legislador opositor, del Partido Colorado, Felipe Schipani, presentó un pedido de informes ante el Parlamento con el objetivo de conocer, entre otros puntos, cómo será el proceso de selección de esos jóvenes palestinos, «para asegurar que no tengan vínculo con organizaciones terroristas». ¿Cómo recibió ese pedido?

—Veo que la gente que habla a veces no tiene conocimiento de lo que está pasando en Palestina, de cómo son los palestinos. Creo que es mejor que hagan una visita, que conozcan a los palestinos, cómo viven, cómo piensan, si son terroristas como dicen del otro lado o son otra cosa. He visto varias delegaciones en Palestina asombradas con la amabilidad del pueblo palestino. Somos un pueblo muy cálido, muy amable. De verdad buscamos cómo vivir en paz, pero, si hay gente a miles de quilómetros que nunca ha estado con comunidades palestinas, que nunca conoció a un palestino y solo escucha los medios que manipulan la información o están controlados por la otra parte, entiendo lo que dicen, pero no tienen conocimiento.

Dice que se opina con desconocimiento bajo la manipulación de la información «de la otra parte». Entonces, además de la amabilidad y la calidez del pueblo palestino de las que habla, ¿cómo describiría usted a Palestina? ¿Cómo es su territorio? ¿Cómo son Cisjordania y Gaza?

—El mar en Gaza es maravilloso. Es un lugar muy bonito, muy bonito. Palestina es muy bonita. No es la más bella del mundo, pero tiene diversidad. Aunque tiene tan solo 27 mil quilómetros cuadrados, tiene a Gaza con sus playas, tiene montañas altas, tiene desierto, tiene el mar Muerto, tiene a Jericó, la ciudad más antigua del mundo. Puedes visitarla, en máximo diez días puedes conocerla toda. Si hubieses podido ver Gaza antes del genocidio, podrías decir que es un paraíso. Palestina es un paraíso.

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En Cisjordania aumentan las agresiones sistemáticas

—En mayo el gobierno israelí aprobó 22 nuevos asentamientos en Cisjordania, es decir, continuó la anexión de tierras. ¿Cuánto ha empeorado la situación en esta región desde octubre de 2023?
—Antes del 7 de octubre de 2023, la agresión de los colonos israelíes era constante, todos los días. Yo vivía en Cisjordania, para ir de una ciudad a otra tienes que pasar por checkpoints [puestos de control militar], tienes que pasar por varias rutas que usan los colonos y donde no puedes adivinar cuándo te van a atacar. Israel ha matado a decenas de civiles en Cisjordania. Pero después del 7 de octubre esto aumentó porque saben que ahora todo el mundo está enfocado en Gaza. Esta es la política de Netanyahu y ha sido la política de Israel desde 1967. Entran a las aldeas palestinas, queman olivos, queman las propiedades de los palestinos y matan a cualquier persona que quiera enfrentarlos o aplicar la autodefensa. Hay más de 50 mil personas sin hogar solamente en el norte de Cisjordania.
La verdad, no sé qué está esperando la comunidad internacional. ¿Qué más quieren para actuar? Todo el mundo sabe que Netanyahu es un asesino, un criminal de guerra. Incluso tiene una orden de captura de la Corte Penal Internacional de La Haya. ¿Qué necesitan las Naciones Unidas para actuar frente a este genocidio, frente a esta limpieza étnica?

Intendentes electos uruguayos en Israel

—Este mes dos intendentes electos uruguayos, Carlos Albisu y Nicolás Olivera, viajaron a Israel junto con pares de la región, en el marco de la Muni Gira Israel 2025, un programa de capacitación de jefes de gobiernos locales de América Latina, invitados por el gobierno israelí. ¿Considera oportuno aceptar en este momento una invitación de ese tipo?
—Si me invitas a tu casa para un almuerzo, aceptaría ir a conocer, pero prefiero que ellos, antes de ir, digan: «Nosotros queremos movilizarnos libremente y ver ambas partes, cómo viven aquí y cómo viven al otro lado». Lamentablemente, los que van con el lado israelí van a ver la perspectiva que Israel quiere que vean. Yo quiero que vayan por su cuenta, para que vean los dos lados y ahí opinen. Pero que vayan acompañados por políticos o parlamentarios israelíes que van a contar su propaganda me parece un desastre.

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