Ritmos nostálgicos - Semanario Brecha
Destacados Suscriptores

Ritmos nostálgicos

Durante su segundo mandato al frente de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, Rodrigo Arim sintió el freno de un orden docente de “visión nostálgica”, sin “convicción” ni “compromiso” para generar cambios que lleven menos de “una década”. En esta entrevista con Brecha, el decano renunciante habló del camino que quiere para la facultad pero que ya no puede liderar.

Rodrigo Arim / Fotos: Fernando Pena

—¿Cómo resumiría sus seis años de decanato?
—Este es uno de los servicios universitarios con más tradición, y tenía dificultades importantes para transformarse. Síntoma de ello es que en el año 1997 se creó una comisión para el cambio del plan de estudios, pero en 2010, 13 años después, todavía no había señales claras para transformar la oferta de grado. Uno de los problemas serios que teníamos era la rigidez de la trayectoria académica, no había casi materias optativas y el recorrido era taxativo: para alcanzar el título había un solo sendero posible. Entonces, lo que todos los órdenes compartíamos cuando asumí era que teníamos que ser capaces de procesar discusiones profundas en tiempos razonables. Yo asumí el 27 de junio de 2010, en 2011 discutimos el plan de estudios y en 2012 se lo e...

Artículo para suscriptores

Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social

Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.

Suscribite ahora

¿Ya sos suscriptor? Logueate

Artículos relacionados

Edición 2056 Suscriptores
Alejandro Mieres, inversor en Conexión Ganadera e intermediario de Mossack Fonseca

Hermano independiente

Edición 2056 Suscriptores
Con José Carlos Mahía, ministro de Educación y Cultura

«La Universidad de la Educación no se acordará entre cuatro paredes» 

Cultura Suscriptores
Galeano dibujante

Tinta y silencio

Cultura Suscriptores
Con Vania Markarian y Franco Morosoli

El archivo de los dos