No es muy frecuente que un músico y su productor, relación comercial mediante, establezcan un vínculo de amistad tan fraterno y cómplice como el que se evidencia desde el primer momento en Memorias de un trovador. Conversaciones con Darnauchans. Esta relación tan cordial (literalmente, “de corazón”) es fundamental para que el producto final del libro sea el que es. Un Darno al desnudo, compartiendo sus ideas más íntimas, sus esperanzas, utopías y desilusiones como no lo podría haber hecho frente a un extraño. La imagen que subyace constantemente: Nelson Díaz y Eduardo fumando frente a una mesa del apartamento del autor de Sansueña, tomando una cerveza en la mitad de la noche, con el grabador prendido registrando todo lo que sale de los labios de ambos, casete a casete, es algo que queda fi...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate