Más espacio para las viñetas - Semanario Brecha
Cultura Suscriptores

Más espacio para las viñetas

Nuño Pucurull (1945-2014) se fue con los últimos días del año 2014, pero volverá en sus obras a buscar aquello que no tiene nombre y a colocárselo, en silencio, como por el bordecito o pretil de lo real.

El lugar marginal desde el que Nuño Pucurull desarrolló su actividad creativa fue mudando, pero nunca alcanzó la corriente principal –ni siquiera cuando la exposición antológica del Subte1–. Siempre se ramificó, bifurcó y siguió lateralizándose. Fue de niño en San José cuando se acercó al arte y estudió con Hugo Giovanetti, más adelante con Guillermo Fernández, Pepe Montes y con Eduardo Díaz Yepes. También recibió nociones de cerámica –de barro– con Eva Díaz. Procuró crear en la cárcel durante los años de reclusión en la dictadura (1972-1985). A veces lo logró. También probó suerte con el grabado (Nelbia Romero), con la fotografía (Jorge Gurovich, Héctor Borgunder), con la escritura, en distintos domicilios y a través de diferentes registros. Buscó darle caras nuevas a las cosas viejas: in...

Artículo para suscriptores

Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social

Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.

Suscribite ahora

¿Ya sos suscriptor? Logueate

Artículos relacionados

Edición 2077 Suscriptores
Con el prosecretario de Presidencia, Jorge Díaz

«El borrador del Ministerio de Justicia está terminado»

Edición 2077 Suscriptores
La deuda soberana y los límites de lo posible

Vivir de prestado

Edición 2077 Suscriptores
Los informes que buscan presentar el creciente rechazo a Israel en Uruguay como un «alza del antisemitismo»

El pastorcito mentiroso

Edición 2077 Suscriptores
Prohibidas las banderas palestinas en la cuadra de la Escuela Integral

La calle es libre si queremos pasarla