El sistema político dejó una enseñanza tras 14 horas de interpelación al ministro de Educación, Ricardo Ehrlich: a pesar del carácter “histórico” con que fueron anunciados los acuerdos educativos multipartidarios de febrero, no será posible convertir a la educación en una política de Estado.
El rompimiento de los acuerdos multipartidarios no deja a la educación al borde del abismo, pero abrirá una nueva etapa en el uso político-partidario de la enseñanza. Aunque fue algo lamentado por el oficialismo y la oposición, las recriminaciones sobre quién tiene la culpa fueron mutuas. Pero es bueno recordar que mientras los acuerdos estuvieron vigentes –los dos últimos años si contamos desde mayo de 2010– el fuego cruzado en materia educativa fue moneda corriente. También habría que des...
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