Digamos que el coronel Eduardo Ferro –“Óscar”, “Guillermo”– ha tenido abundante “suerte”: estuvo implicado en la desaparición y el asesinato de Fernando Miranda, participó en la desaparición de María Claudia García de Gelman, está identificado en la detención, secuestro, asesinato y desaparición de Óscar Tassino, comandó el secuestro en Brasil de Universindo Rodríguez y Lilián Celiberti, y participó en el centro clandestino de detención Club Atlético, en Argentina, del interrogatorio, tortura y desaparición de Andrés Bellizzi y Jorge Goncálvez. Sin embargo, nunca tuvo que responder ante la justicia. Y cuando, finalmente, la causa judicial sorteó todas las chicanas y cobró impulso, el magistrado no tuvo la precaución de cerrar las fronteras en el momento de ordenar su citación al juzgado pa...
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